viernes, 16 de abril de 2010

Planeando el ascenso al Monte Fuji


     Un punto clave de este viaje está en el ascenso al monte Fuji, para mí supone un punto y aparte en la agenda del viaje y constituye una apuesta personal. El monte Fuji o, literalmente en japonés, Fujiyama es un cono de volcán activo cuya cota es el techo de Japón con 3776 metros de altura.  Para los japoneses esta emblemática montaña es un icono nacional, hasta el punto de considerar que todo habitante de Japón debe subir al menos una vez en la vida a contemplar el sol naciente desde su cima.

Debido a este marcado carácter de patrimonio nacional y a su cercanía a Tokyo (poco más de 2 horas en autobús) el ascenso a la montaña se ha convertido en una auténtica peregrinación.  Miles de japoneses y cientos de extranjeros suben por sus laderas, en los meses de verano, para poder captar los primeros rayos de sol que bañen el horizonte. Por supuesto, tal afluencia de público es imposible, sin llevar asociada una auténtica reconversión de la montaña en algo más parecido a un parque temático.





 Reconversión que incluye una carretera hasta los 2300 metros de altura, en torno a 20 refugios de montaña en la ruta principal, zonas de descanso a intervalos regulares en el ascenso que incluyen las maquinas expendedoras más altas del mundo, pistas escalonadas y guiadas prácticamente hasta la cima, rutas de ascenso y descenso separadas, servicios lanzadera de autobus a cada una de las cuatro bases,…
Semejante infraestructura convierte su ascensión en algo atípico y puede hacer que se nos olvide que estamos hablando de que se superan los 3700m y que las condiciones que se afrontan, incluso en verano, son de alta montaña.




Teniendo en cuenta todos estos factores pra nuestra organización nos lanzamos a preparar desde aquí, nuestra propia subida. La idea es coger un autobús (Chuo Highway bus) en la estación de Shinjuku que nos acerca directamente a la 5ª estación del monte Fuji. Otra opción seía llegar al pueblo de Kawaguchiko desde el que suben autobuses lanzadera (Hiking buses) con bastante más frecuencia. Desde el límite de la carretera  o 5ª estación deberíamos poder subir en 4 - 5 horas hasta la 7ª u 8ª (2700 - 3000 metros de altitud) donde podríamos descansar hasta que de madrugada atacásemos la cumbre.


De nuevo, el plan es ver amanecer desde la cima, hacer unas maravillosas fotos y descender por la ruta de Fujinomiya para poder desayunar en la base y desde allí enlazar con el tren bala y nuestro siguiente destino:
Kyoto


viernes, 9 de abril de 2010

Primeros datos del viaje a Japón

Con las fechas impuestas por nuestro maravilloso billete con la compañía Aeroflot, se empiezan a dibujar líneas claras de lo que será nuestra estancia. Disponemos de 9 días totalmente aprovechables y lo primero que hemos hecho para distribuirlos es localizar los alojamientos donde pasar las noches correspondientes, quedando la cosa así:
  • 5 noches en Tokyo
  • 3 noches en Kyoto
  • 1 noche en Shizuoka
Tal vez no sea lo más acertado, pero hemos preferido partir nuestra estancia en Tokio en dos. Según salgamos del aeropuerto tenemos dos días y medio para aclimatarnos a la vida tokiota y dejar la mitad de la agenda de la ciudad solucionada. Después tomaremos un respiro del bullicio para hacer contacto con la naturaleza y subir al monte Fuji (3776m). La idea es subir temprano, hacer cumbre hacia la 15:00 o 16:00 y descender, con el sello acreditativo de haber tocado el techo de Japón, para tomarnos un merecido descanso en Shizuoka a orillas del mar. Sin tiempo para recrearse demasiado,dejaremos Shizuoka temprano para dirigirnos a la ancestral Kioto. De nuevo afrontaremos un cambio de aires para encontrarnos con un Japón más tradicional donde pasaremos casi 3 días completos, que esperemos nos permitan una pequeña escapada a ciudades cercanas como Osaka, Nara o Kobe. Finalmente tras nuestro periplo por Kansai tomaremos rumbo de vuelta a Tokio con otros dos días por delante para rematar todos los flecos pendientes.
Por si a alguien le interesa le dejo aquí los sitios donde pensamos dormir a lo largo del viaje:
  • Tokio:
- Albergue Yoyogi YH -
 


Olympics Memorial, 3-1
Yoyogi Kamizono-cho
Shibuya 151-0052, Tokyo
Teléfono: 81-3-3467-9163
Fax: 81-3-3467-9417

Reserva:
1 noche - 2 camas: 6000 JPY



- Hotel JR Mets Shibuya -

3 - 29 -17 Shibuya
Shibuya-ku - 150-0002
Tokyo
Teléfono: 81-3-3409-0011
Fax: 81-3-3409-0023

Reserva:

Habitación doble - Welcome to Tokyo plan (Incluye desayuno y tasas): 16000 JPY




- Hotel Capsula Green Plaza Shinjuku -


1 -29 -2 Kabukichyo,
Shinjuku-ku,
Tokyo
Teléfono:
81-3-3207-5411;
Fax: 81-3-3207-5417
 
Reserva:
1 noche - 2 capsulas estándar : 7000 JPY




- Albergue Sumidagawa YH -


2 - 21 - 4 Yanagibashi,
Taito-ku, 111 - 0052
Tokyo
Teléfono: 81-3-3851-1121
Fax: 81-3-3851-1130
Reserva:
2 noches - 2 camas: 11960 JPY




  • Kyoto:
- Chita Guest Inn -


343 - Takatsuki-cho,
Kyoto
Teléfono: 81-75-361-1802
Fax: 81-75-361-1816
 
Reserva:
Habitación doble - 3 noches : 21000 JPY






  • Shizuoka:
  - Hotel A'bant Shizouka -

12-5 Denma-cho, Aoi-ku,
 Shimizu-shi, Shizuoka
Teléfono: +81-54-273-1717

Reserva:
Incluye Desayuno
Check-in/Check-out: Check-in 15:00 / Check-out 11:00
Fecha check-in: Jul/16/2010
Fecha check-out: Jul/17/2010
Habitación: Doble  13 m2 
Tamaño de las camas: 125cmx205cm

Importe: 9,450 JPY
  

Encajando un puzzle o viajar cuando la pasta importa

Cuando el presupuesto de un viaje está ajustado se te plantean muchísimos dilemas. Pero antes de este viaje me gustaría reseñar 3.

El primero, en los destinos que puedes abarcar. Cómo tu cartera no se estira como los chicles no puedes tomar cualquier medio de transporte o dormir todo lo cerca que te gustaría de un determinado lugar, así que olvídate de visitar esto o lo otro y menos cuando tú quieras porque la falta de dinero te va impedir llegar. Podríamos llamar a este primer dilema, la paradoja dinero – tiempo.

El segundo de los dilemas está en la calidad y viene a ser una reflexión del tipo ‘vamos a ver, si duermo 10 días en un banco, puedo coger 2 trenes más, comer como un rey 2 días y traerme algún detalle, pero si como hamburguesa desayuno, comida y cena tal vez consiga dormir 2 noches sin que se me claven los tornillos de este maldito banco’. Obviamente es una exageración, pero realmente ajustar el presupuesto de alojamiento y manutención sin pasar penurias es una aventura. A este le llamaremos el dilema Mediamarkt o ‘yo no soy tonto’, que consiste en buscar calidad al mejor precio.

Por último, al menos en mi caso, cabe destacar otro dilema que se presenta una vez que estás en tu destino y es el desorden en los gastos. Los primeros días, la tendencia es a gastar a manos llenas, todo te llama la atención y gastas para ver esto, para comer aquello, para comprar un detalle,… Total que cuando llevas 3 días te das cuenta de que o bien racionas el dinero o te toca ir del hotel al aeropuerto andando. Regular las visitas y los gastos a lo largo de la estancia es otro gran problema, al que a falta de otra cosa mejor denominaré la paradoja de la Saca menguante.

En este punto alguien se podría preguntar ¿a cuento de qué publica esta entrada?

La respuesta es sencilla. Durante la preparación del viaje he vuelto a comprobar que si me diesen igual 8 que 80 no hubiera sido un caos la elección de fechas para coger un billete de avión, los alojamientos podrían haber sido mucho más estratégicos (lo que los convertiría en más caros, por supuesto), no tendría la sensación de que pierdo tiempo de viaje en transportes no del todo eficaces, no me hubiera preocupado que hacer con el equipaje y así un largo etcétera. Pero bueno, también hay que reconocer que de esa manera hubiera perdido un punto de gracia (y de frustración) que aporta el hecho de encajar las piezas de ese puzzle denominado presupuesto.